La vida, la sonrisa, la envidia.
Componer con mucho ingenio cuesta y la vida por minutos se va, la edad se apodera de mi rostro y mi cuerpo y mi cabeza no me deja dormir en paz.
Dejé por momentos la bebida,me descuidé a mí creyendo ser el culpable de la pregunta que me hicieron a mí.
He caído al fondo del abismo donde ya sólo queda desilusión y tragos de alcohol para aguantar esta vida infame donde la salida no es la correcta y la sonrisa no es perfecta.
Dónde una carcajada molesta y donde los sueños son cimas de decadencia. Ya no quedan sonrisas de diseño, tampoco recuerdos, ya se ve la cadena en la cuneta donde arrastran los cimientos de esta carretera que es la vida y donde ser feliz no cuesta dinero, ni siquiera cuesta sonreír, tan solo cuesta envidias las sonrisas y ese es tu logro, dar envidia riendo, así que riamos todos. para acabar con la envidia y los celos. Enfermedades que padecen los metidos en el sistema que quieren dar un paso en tu camino sin allanarlo poniendo obstáculos, no dejándote crecer.
Aprendamos a creer para crecer a ayudarnos a olvidar…
Aprendamos a ser felices y a respirar el aire que nos pertenece y no el de los demás, a respirar a nuestro ritmo y sin ansiedad.
Hace tiempo que no escribía para el blog olvidado en la red, todo es tan diminuto que cuesta darse a conocer, pero no lo hagamos por crecer hagámoslo por gusto, por ego, por placer, hagámoslo sin miedo a que se rían o a perder. Por qué nos gusta soltar palabras y desahogar nuestro ser, que está cansado de injusticias, de miserias, de funerales tristes, de días de pena y de lágrimas por algo que quizá quisimos demasiado y no fue correspondido, eso que quizás fue perdido pero peleado y aunque no actuamos como debimos lo hicimos lo mejor que pudimos.
Saliendo malheridos pero sonriendo pues por cada día triste hay diez de alegría y no se acaba el mundo, sino que acabamos con el mundo entre tanta contaminación, tanto consumismo caro.
Más terrazas y más teatros, más conciertos y más tragos. Menos lastimarnos de lo que quedó en el camino y más alegrías por lo que nos queda por descubrir. Cuando el sol se esconda volverá a aparecer, cuidemos el planeta, cuidemos nuestra piel, nuestra cabeza. Nuestras ganas de querer reír y de aprender a consumir.
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